Que vengan los bomberos...

Siempre se puede puede tirar un poquito más de la cuerda, o no? El tema es hasta cuándo, hasta cuándo se soporta tanta negligencia, tanto egoísmo por parte de nuestros gobernantes. No sólo el humo tornó irrespirable el ambiente, sino también la angustia de la gente que, como vos y como yo, se levanta a trabajar todos los días y se enfrenta con una realidad demasiado hostil.
Hace días que arden pastizales en el Delta, pero no importa, como no sabemos prevenir las tragedias esperamos que haya cuatro muertos en las rutas.

El humo avanza y los días pasan. Hoy, apenas se divisa el obelisco. Pica la garganta, los ojos lagrimean sin cesar, se sienten puntadas profundas en la sien y los bronquios se llenan de una humareda que te seca la boca y te deja sin aliento.
Cierran los puertos, los aviones no aterrizan, la capital se desconecta del norte del país y los campos....los campos siguen ardiendo.
Y cuando parecía que nada más podía enrarecer el ambiente, el poder político nos dio otra clase surrealista de demagogia e irresponsabilidad. Ojalá pudiera decir que son maquiavélicos, pero no, eso es demasiado...a duras penas se comportan como títeres prepotentes y paranoides que buscan poner sus culpas afuera, en el enemigo........a quien no pueden doblegar con la extorsión y el miedo, entonces los enfrentan a la sociedad como si los arrojasen a los leones.
Señora presidente, háganos un favor y asuma. Empiece a trabajar, dése un baño de realidad, camine, recorra el país, vea con sus propios ojos, cómo está SU país. Respete su investidura y dignifique con su gestión a quienes le dieron el voto de confianza. Por favor, hágalo hoy, antes que nos devoren las llamas. Muchas gracias.